El
pequeño archipielago Chinijo, al norte de Lanzarote, fué el destino elegido
para nuestro viaje, unas ricas aguas que nos brindaron estupendas jornadas de
pesca al jigging, con abundantes picadas y hermosas piezas, solo enturbiado por
un fuerte viento que sopló durante todos los días y que nos impidió pescar en
las zonas mas expuestas. Aún así fué un gran viaje que no defraudó a nadie,
poniendo la guinda al pastel, una gran serviola cercana a los 70 kilos, que nos
tuvo en tensión mas de 30 minutos. Un destino que año tras año nos sorprende
mas. Los equipos utilizados fueron :